La cáscara de limón contiene aceites esenciales volátiles aromáticos que ayudan a relajar los vasos sanguíneos, además son útiles pala el dolor articular y el nervio, ya que producen un efecto anti-inflamatorio.
La cáscara de limón contiene 10 veces más vitaminas que el jugo y elimina toxinas del organismo. Es rica en vitaminas C, A, B1 y B6, magnesio, fosforo, calcio, potasio, bioflamonoides, pectina y ácido fólico.
A continuación, vamos a revelar dos formas muy eficaces para prevenir la inflamación y el dolor crónico utilizando cáscara de limón.
1. Asegúrate de utilizar limones orgánicos. Coloca la cáscara de 2 limones enteros y arrójalos en un frasco con aceite de oliva. Cierra el frasco y déjalo reposar durante dos semanas. Después de dos semanas el aceite beneficioso estará listo. Debes frotar sobre la zona afectada, envolver con una gasa y dejar actuar toda la noche.
2. Ralla la cáscara de un limón, tomando en cuenta que solo se necesita la capa amarilla. Frota la cáscara específicamente en la parte afectada. Envuélvelo con un vendaje y mantenlo así durante 2 horas.